Desde su llegada a los Países Bajos, la reina Máxima Zorreguieta ha demostrado una notable capacidad de adaptación, no solo por su carisma y dedicación a la monarquía, sino también por su impresionante habilidad para los idiomas.
Nacida en Buenos Aires en una familia de raíces argentinas e italianas, Máxima domina con fluidez el español, inglés, italiano y holandés, un talento que ha sido clave en su integración a la sociedad neerlandesa y en su desempeño como representante de la Casa Real.
Cuando Máxima se comprometió con el entonces príncipe heredero Guillermo Alejandro, sabía que aprender neerlandés era esencial para su futuro en la monarquía. Al llegar a Países Bajos, no tenía conocimientos previos del idioma, pero encontró una manera ingeniosa de aprenderlo en tiempo récord: a través de la música.
En varias entrevistas, la reina confesó que una de las estrategias que más le ayudó a familiarizarse con el idioma fue escuchar canciones infantiles. “Comencé a aprender con las canciones que escuchan los niños. Así empecé a identificar una palabra, luego otra y así. Las canciones repiten las palabras y cuando las escuchas todo se vuelve más simple”, explicó.
Uno de los temas que más le sirvió en su aprendizaje fue 15 Miljoen Mensen, del dúo Fluitsma & Van Tijn, un clásico de la música neerlandesa. Además, su habilidad para tocar la guitarra le permitió internalizar mejor las palabras y estructuras gramaticales del idioma.
Su esfuerzo no se limitó a la música: también realizó cursos de cultura y lengua holandesa, que finalizó en 2005. Gracias a esta combinación de métodos, logró no solo hablar con fluidez el idioma, sino también conectar profundamente con la cultura de su nuevo país.
El español, su lengua materna, sigue siendo una parte fundamental de su identidad y le permite mantener un vínculo estrecho con sus raíces latinoamericanas. A pesar de los años viviendo en los Países Bajos, Máxima nunca dejó de hablar español y en más de una ocasión ha dejado claro su orgullo por su herencia. “Soy latina y seguiré siendo latina. Bailo, canto y seguiré bailando y cantando”, ha expresado en diversas oportunidades.
El inglés, por su parte, ha sido esencial en su papel como Asesora Especial del Secretario General de las Naciones Unidas en temas de inclusión financiera y como presidenta honoraria del programa de finanzas inclusivas del G20. Este dominio del inglés le ha permitido desenvolverse con fluidez en foros internacionales, facilitando su comunicación con líderes y organizaciones de todo el mundo.
Además, gracias a sus raíces familiares, también habla italiano con soltura. Este idioma le ha permitido mantener vínculos estrechos con la parte italiana de su familia y con la rica herencia cultural de sus ancestros.