El techo de un salón de fiestas ubicado en el barrio porteño de Caballito se derrumbó este jueves durante un cumpleaños infantil, en un accidente que tuvo una dosis de fortuna ya que lo chicos que habían asistido habían salido momentos antes del lugar donde colapsó.
El hecho ocurrió en el salón Funky, situado sobre la calle Paysandú al 1100, donde se celebraba un cumpleaños de 4 años.
Según informaron a la Agencia Noticias Argentinas, se desprendió una parte del cielorraso de durlock. «En la planta baja, en un ambiente de 4 por 10 metros, se desprendieron aproximadamente 3 por 8 metros de placas de durlock del cielorraso, desde una altura de 2,8 metros, sin que quedaran personas atrapadas», detallaron las fuentes.
Al lugar acudió personal de la Guardia de Auxilio, que realizó una inspección en el inmueble de dos plantas. Según informó TN, los chicos recién terminaban de festejar y se habían dirigido a la puerta de salida a saludar. Allí fue cuando escucharon el ruido del desplome.
El salón cuenta con múltiples espacios recreativos para los chicos, como pelotero, plaza blanda, cancha de fútbol, metegol, un laberinto y una nave móvil. Para los adultos, hay un comedor y un jardín con parrilla.
Damián, padre del chico que festejaba su cumpleaños, contó cómo se vivió ese momento dramático: «Estuvimos en ese salón unas dos horas comiendo. En un momento, una de las animadoras nos invita a salir y se escucha que se cae un pedazo. Todos vimos cómo se cayó el techo. Hubo gritos, llantos y después salir del lugar»
El hombre no le adjudica el derrumbe a la tormenta y plantea que había una estructura mal amurada. «Los dueños no tienen explicación, se pusieron a disposición y nos dijeron que nunca les había pasado en 18 años», dijo, pero remarcó que analizan cómo continuar y pedirán las habilitaciones.
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