Analistas plantean distintos escenarios, según la cantidad de granos que se liquiden hasta fines de octubre. Cómo puede impactar en términos fiscales
22/09/2025 – 17:27hs
La decisión del Gobierno nacional de eliminar hasta el 31 de octubre los derechos de exportación para el complejo oleaginoso y cerealero, con un tope de liquidación de u$s7.000 millones, tendrá un fuerte costo fiscal.
El Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) calculó tres escenarios posibles:
- En el primero, se liquida 40% del stock de maíz y 100% del de soja.
- En el segundo, 60% del maíz y 90% de la soja.
- En el tercero, 80% del maíz y 80% de la soja.
Cuál será el impacto en la recaudación de la quita de retenciones
«En términos del PBI, el costo directo va desde 0,25% del PBI hasta 0,28% del PBI», explicó el Iaraf.
De acuerdo con los cálculos, si se considera la recaudación adicional por Ganancias y su posterior coparticipación, el costo directo se reduce. Así, en el escenario uno sería de 0,26% del PBI (u$s1.600 millones); en el escenario dos, 0,24% del PBI (u$s1.550 millones); y en el escenario tres, 0,23% del PBI (u$s1.460 millones).
«Obviamente, hay un desfasaje, teniendo en cuenta que el impuesto a las ganancias se tributa al año siguiente», aclaró el informe.
Según Iaraf, al comparar con el flujo previsto en el Presupuesto 2026, el impacto neto sobre este año es menor. «Concretamente, según nuestros cálculos el costo fiscal directo imputable al año 2025 sería de 0,15% del PBI (aproximadamente u$s1.000 millones) y el neto de recaudación del impuesto a las ganancias de 0,14% del PBI». Y concluye: «Es decir, la pérdida de recaudación sería equivalente al 46% del superávit fiscal de 2025 que surge del Presupuesto 2026 de 0,3% del PBI».
Cuántos dólares le quedan por liquidar al campo
El objetivo oficial es incentivar la liquidación de divisas. Para eso, se fijó un límite de u$s7.000 millones o hasta el 31 de octubre. El impacto en la recaudación dependerá del grano exportado y el volumen de ventas.
Según el analista Pablo Andreani, el potencial de ventas suma 10 millones de toneladas de maíz (u$s2.000 millones) y 15 millones de toneladas de soja (u$s6.300 millones). Es decir, hay disponibles u$s8.300 millones para liquidar.
Andreani proyecta que «el costo fiscal se ubique entre 1.500 y 1.800 millones de dólares«, aunque advierte que podría ser menor: «La mejora del precio debería ser muy importante para que se vea tentado», dijo, en referencia a que los productores podrían retener soja hasta que haya mayor certidumbre económica tras las elecciones de octubre.
En la misma línea, el consultor agropecuario Javier Preciado Patiño explicó que en octubre la recaudación habitual por retenciones ronda los $650.000 millones y que la clave será la composición de ventas. «Si es principalmente soja, la pérdida será más alta porque la alícuota es del 26%; en maíz es 9,5% y en girasol, 5,5%», precisó.
Por su parte, Dante Romano, del Centro de Agronegocios de la Universidad Austral, coincidió en que será difícil llegar al tope de u$s7.000 millones. Señaló que el recorte de tasas de la Fed «no alcanzó para debilitar el dólar y le puso un techo a los valores de los granos». Aun así, consideró que habrá una liquidación fuerte y estimó una pérdida de recaudación de entre u$s1.200 y u$s1.400 millones.
