Tamara Báez, la ex pareja de L-Gante y mamá de Jamaica, atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida. Acostumbrada a mostrar en redes su faceta más relajada y divertida, esta vez sorprendió al compartir un mensaje cargado de dolor. A través de sus historias de Instagram, la influencer reveló que un familiar muy cercano está atravesando una delicada situación de salud que la tiene completamente angustiada.
“Solo le pido a Dios que salga de esto”, escribió Tamara, acompañando el mensaje con un emoji de plegaria y una imagen en la que se la ve en silencio, mirando al horizonte. Sus seguidores, que la conocen por su actitud frontal y desinhibida, no tardaron en preocuparse ante la falta de detalles.
Sin embargo, con el correr de las horas, ella confirmó que el drama afecta a una persona de su círculo íntimo y que se encuentra totalmente enfocada en acompañar a su familia. «Me duele todo», agregó.
Tamara no quiso revelar públicamente de quién se trata, pero dejó entrever que se trata de una figura clave en su vida. En medio de esta situación, compartió también mensajes de fe y espiritualidad, algo poco habitual en su cuenta, donde suele mostrar más contenido de moda, música y momentos junto a su hija. Esta vez, eligió el silencio y el pedido de respeto.
“Hay cosas que no se dicen pero se sienten, y cuando el corazón duele no hay filtro que aguante”, publicó en una de sus stories. El mensaje conmovió incluso a algunas figuras del ambiente, que le hicieron llegar palabras de apoyo en privado.
SE ALEJA DE LAS POLÉMICAS PARA CUIDAR A LOS SUYOS
Tras su escandalosa separación de L-Gante, con quien mantuvo una relación repleta de idas y vueltas, denuncias y reclamos mediáticos, Tamara venía manteniéndose alejada de los conflictos. Si bien ocasionalmente subía indirectas que muchos interpretaban como dardos a Wanda Nara —pareja del cantante durante un tiempo—, en los últimos meses había optado por enfocarse en su hija y su carrera como influencer.
Ahora, este golpe emocional parece haberla sacado por completo del radar mediático. “Mi familia está primero, siempre”, escribió para cerrar el día. Sus seguidores, que en su mayoría son jóvenes mujeres que se identifican con su historia de lucha, le dejaron miles de mensajes de apoyo.
Lejos de las polémicas con L-Gante, las fiestas y las peleas mediáticas, Tamara se muestra más reflexiva. En su entorno afirman que está intentando construir una vida más estable, alejada del escándalo y enfocada en su crecimiento personal. Incluso, en las últimas semanas había empezado a trabajar en nuevos proyectos de moda urbana y hasta había evaluado abrir su propio local en zona oeste.
Sin embargo, todo quedó en pausa con esta situación. “Hay prioridades”, habría dicho a sus íntimos. Por ahora, Tamara se refugia en la fe y en el cariño de quienes la siguen. Y mientras el mundo del espectáculo sigue girando, ella pide solo una cosa: que todo termine bien.