En diálogo con Canal E, el analista Federico González analizó el impacto político del regreso de Cristina Kirchner al debate público, el rol del Gobierno y los desafíos económicos que atraviesan a la sociedad argentina.
Cristina Kirchner: presencia sin cuerpo, poder con voz
“Cristina Kirchner está en el centro de la escena, es un actor político relevante”, afirmó el entrevistado al analizar las implicancias políticas de la causa judicial que involucra a la expresidenta. Según explicó, su reaparición mediática genera una narrativa potente: “Lo de ayer, como puesta en escena, mejor no le podría haber salido”.
El analista enfatizó la fuerza simbólica de su figura, incluso sin presencia física: “No hay nada más seductor que una voz sin cuerpo”, comparándola con el impacto emocional del radioteatro. Para González, el Gobierno enfrenta una paradoja: “El anti-Kirchnerismo quería que Cristina esté presa, pero ahora hay que bancarse las consecuencias”.
Javier Milei y una economía que aún no llega a todos
Al evaluar la situación política del presidente Javier Milei, González fue categórico: “El gobierno todavía tiene fortaleza a nivel país, pero en la provincia de Buenos Aires está cerca de un empate”. Pese a algunos datos alentadores, advirtió que los efectos positivos aún no se sienten de forma generalizada.
“Los beneficios del equilibrio fiscal y la desregulación todavía no hacen que yo viva mejor”, señaló, subrayando una desconexión entre los logros macroeconómicos y la vida cotidiana de la población.
Inflación y percepción ciudadana
Aunque el Gobierno logró una baja en la inflación, González remarcó un nuevo problema emergente: “Ahora la gente se da cuenta que esa era una expresión del infierno”, en referencia a la inflación. El verdadero mal, afirmó, es otro: “El problema no era la inflación, el problema era el poder adquisitivo del salario”.
Con tono reflexivo, comparó esta situación con una metáfora de Miguel de Unamuno: “¿Qué importa que haya inflación o que no haya si yo vivo peor?”, cuestionando la eficacia política de los logros si no se traducen en mejoras tangibles para la ciudadanía.
Las pymes y la desigualdad sectorial
La situación económica también afecta directamente al tejido productivo. “Las pymes son uno de los sectores que claramente están peor que antes”, aseguró González, advirtiendo que la recuperación es “muy sectorial”, limitada al energético y minero.
“Si vendo menos, tengo un problema”, resumió. Según su lectura, la visión de Milei se basa en que la libertad económica resolverá por sí sola el resto de los problemas, pero advirtió: “¿Qué pasa si liberamos y no pasa nada?”
Estabilidad macro con piso bajo
González reconoció que ciertos indicadores, como el dólar y la inflación, se han estabilizado. “Hay estabilidad económica, pero yo, en un piso muy bajo”, dijo. Mencionó especialmente el caso de los docentes universitarios y jubilados: “En diciembre y enero perdimos un 40%”, una pérdida que, según sostuvo, aún no ha sido revertida ni reconocida.